El sembrado maniqueísmo entre contratista y contratado ha logrado tristemente su cometido, me atrevo a decir que en el mundo entero, por supuesto que, en algunos países más que en otros.
El sembrado maniqueísmo entre contratista y contratado ha logrado tristemente su cometido, me atrevo a decir que en el mundo entero, por supuesto que, en algunos países más que en otros.