La Vinotinto sacó petróleo en esta doble fecha FIFA

Por Luis Mendoza

En nuestra sociedad venezolana es común el sentirse orgulloso por los rasgos característicos que conforman la cultura, y eso va desde el regionalismo de los zulianos, pasando por el chalequeo de los centranos, y por qué no, por del acento andino, hasta llegar a las populares frases cargadas de emoción e historia que ayudan a reconocernos como país.

Estas mismas características se reflejan en el deporte. Y si bien es cierto que el béisbol es de gran arraigo en nuestro país, en diferentes momentos, esa misma pasión y esos modismos tan típicos que existe en este juego se han generado también en el futbol, ya que a lo largo del tiempo la selección nacional de Venezuela, mejor conocida como La Vinotinto, ha causado una montaña rusa de emociones.

Además, luego de esta doble fecha histórica con resultados positivos y 52 mil personas cantando y apoyando a La Vinotinto, el común denominador se va nuevamente ilusionando. Y no podía faltar el condimento venezolano de hacer nacer un lema en esta aventura, y ese es el “Mano Tengo Fe”, que toma fuerza antes de enfrentar a Brasil en Cuiaba.

Antes de entrar en el análisis de lo que dejo esta doble fecha FIFA para los venezolanos, es importante destacar un detalle, y es que este lema o etiqueta que se hizo tendencia en las redes sociales, tuvo adentro de la misma selección gran aceptación, tanto así que, los jugadores lo postearon.

Este fenómeno de euforia y grandes expectativas reflejadas en la popularidad de una frase, ya se había vivido en ciclos pasados, por ejemplo, el lema que identificó la era de Richard Páez fue “¡Que Viva La Vinotinto!”, nacida de una canción de una famosa banda venezolana.

Teniendo esto en cuenta, podemos decir que las generaciones que hemos vivido otros ciclos, tenemos ahora mismo una especie de déja vu que hasta los momentos ha dado alegrías a todo un país, viendo a un Yeferson Soteldo con la emoción que años atrás se vio a Juan Arango en cancha. De aquella época también datan Alexander Gonzales, Jorge “Zurdo” Rojas o José Manuel Rey, entre otros, que hicieron vibrar millones de corazones.

Ahora, en cuanto al análisis deportivo se trata, podemos señalar que la planificación y metodología futbolística siempre ha caracterizado a los directores técnicos argentinos, y cada uno tiene sus cábalas y formas de dirigir los enfrentamientos con la esférica.

Fernando Batista ha dejado claro en la cancha que el partido contra Colombia solo fue una pisada en falso que pareciera quedar atrás, sobre todo, ese trago amargo al comienzo del segundo tiempo. Ha corregido, tanto así, que sólo dos goles la recibido la selección. La mentalidad en cancha, y ese cuchillo entre los dientes que Farías alguna vez mencionó en su ciclo, pareciera reaparecer nuevamente en estos momentos.

La lectura de los partidos se ha hecho con una total certeza, tanto así, que el jugador Eduard Bello se convirtió en una figura de la selección tras hacer un gol soñado por él y por cualquier hincha del futbol en Brasil, un gol que valió un puntazo de oro y que se revalorizó la extraordinaria presentación en Maturín, donde vimos un equipo compacto, ordenado y ofensivo, guiado por su número 10 (Soteldo).

Ha sido esta la receta para encontrar los goles en los momentos precisos y así meter en la mochila 4 puntos que dejan una gran expectativa e ilusión ante la próxima y última fecha por este año para el mundial de México, Canadá y Estados Unidos 2026.

Comparte este artículo:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *